La mediumnidad escribiente, también conocida como psicografía, es una práctica espiritual que ha sido explorada en distintas tradiciones, especialmente dentro del espiritismo kardecista, fundado por Allan Kardec en el siglo XIX. Esta forma de mediumnidad consiste en la escritura que, según quienes la practican, no proviene del pensamiento consciente del individuo, sino de una influencia externa o intuitiva.
En este contexto, la psicografía no se presenta como un fenómeno mágico ni como una herramienta para obtener verdades absolutas, sino como una experiencia subjetiva, que puede ofrecer valor introspectivo y espiritual a quienes la cultivan.
Una mirada histórica: Allan Kardec y la codificación espírita
Allan Kardec, pedagogo francés y autor de El Libro de los Médiums (1861), investigó diversos fenómenos atribuidos a la mediumnidad. Según Kardec, la escritura automática es una de las formas más accesibles de mediumnidad, y puede ser desarrollada con disciplina y apertura mental, más allá de dogmas religiosos o rituales específicos.
Kardec distingue entre varios tipos de médiums escribientes, clasificándolos según el grado de conciencia que tienen durante el proceso (Kardec, 1861). Estas categorías —mecánica, semimecánica e intuitiva— siguen siendo utilizadas hoy por quienes practican esta forma de comunicación espiritual.
¿Qué ocurre durante una sesión de escritura automática?
Desde una perspectiva espiritual, se cree que el médium se sintoniza con una conciencia no física o espiritual, que influye sobre sus movimientos al escribir. No obstante, desde un punto de vista psicológico, también se ha interpretado como una forma de expresión del inconsciente.
En los primeros intentos, es común que surjan trazos incoherentes o movimientos temblorosos. Con práctica, algunas personas afirman lograr escribir mensajes con contenido coherente, simbólico o reflexivo. En todo caso, este proceso no debe sustituir el pensamiento crítico ni el discernimiento personal.
Preparación: disposición interior antes que formas externas
Según el espiritismo kardecista, lo esencial para desarrollar la psicografía no son los gestos externos, sino la disposición interior: serenidad, concentración y una intención positiva. Algunas recomendaciones prácticas incluyen:
- Reservar un momento diario de calma (10-15 minutos).
- Evitar expectativas rígidas o forzadas.
- Practicar la observación y el registro personal de cada experiencia.
- Mantener una actitud abierta, sin sustituir la experiencia por creencias absolutas.
Es importante recordar que no todas las personas desarrollan esta capacidad, lo cual no debe interpretarse como un fracaso espiritual, sino como parte de la diversidad de sensibilidades humanas.
Claves para una experiencia introspectiva significativa
Quienes exploran la escritura automática suelen seguir algunos principios éticos y prácticos, como:
- Realizar preguntas claras y constructivas, evitando motivaciones egocéntricas o triviales.
- Adoptar una actitud de respeto hacia cualquier experiencia subjetiva que surja.
- Evitar usar la práctica como método para tomar decisiones importantes sin análisis racional o apoyo profesional.
Tipos de mediumnidad escribiente
Allan Kardec identificó tres formas principales de mediumnidad escribiente:
- Mecánica: la mano del médium se mueve sin intervención consciente. El contenido suele ser desconocido para la persona hasta que se lee posteriormente.
- Semimecánica: el médium tiene cierta percepción del contenido mientras escribe, aunque no lo dirige.
- Intuitiva: la información surge a nivel mental, y el médium la redacta conscientemente. Es más susceptible a la influencia del pensamiento personal, pero igualmente valorada dentro del proceso introspectivo.
Psicografía y arte: el caso de Austin Osman Spare
Fuera del ámbito kardecista, otras corrientes también han explorado la escritura y el dibujo automáticos como medios de canalización. Un ejemplo es Austin Osman Spare (1886–1956), artista y ocultista británico. Spare desarrolló una técnica que integraba estados alterados de conciencia con creación artística, práctica que ha influido en movimientos como la Magia del Caos.
Una práctica para la exploración interior
La escritura automática, en cualquier forma, puede entenderse como una herramienta de autoconocimiento o meditación activa. No es un acto sobrenatural ni reservado a personas especiales: más bien, se trata de una práctica que algunas personas encuentran útil para reflexionar, canalizar emociones o explorar aspectos sutiles de su mundo interior.
Importante: Esta práctica no reemplaza el consejo médico, psicológico o profesional en ningún sentido. Quienes deseen profundizar pueden encontrar orientación en textos clásicos del espiritismo como:
- El Libro de los Espíritus (Allan Kardec, 1857)
- El Libro de los Médiums (Allan Kardec, 1861)
La mediumnidad escribiente es una práctica espiritual que invita a la introspección, la paciencia y la conexión interior. Más allá de lo que se escriba, lo esencial es el proceso personal que implica: el cultivo de la atención, la escucha interna y el respeto por lo intangible. Como toda herramienta espiritual, debe usarse con responsabilidad, ética y apertura a la pluralidad de interpretaciones.
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